Yo sabía que no estaba paranoico. A mi, alguien me sigue...

7 de agosto de 2008

NN


Gustavo

Gusssss-tavo !

Por favor…
Yase yase.
No es Brian, ni Demian, ni mucho menos Shonatan, pero esto ya sería como untarse los huevos con mermelada de kiwi y frutilla y sentarse en el medio del campo en bolas y al sol.

Qué quiere que le diga? Gustavo es neutro. Un nombre olvidable, políticamente correcto pero incompleto. Uno no toma riesgos al bautizar a su hijo con un “Gustavo”.
A mi me hubiera encantado llamarme SKAR, o INDIANA uuuhhh Indiana hubiera estado copado.

Lo que definitivamente me hubiera gustado, lo que me provoca envidia malsana, lo que hace que maldiga al cielo por la poca inspiración de mis padres, es lo de este muchachito de Singapore…


FUCKING suertudo !!

Coincidirá Ud. conmigo si sostengo que no hay nada más inútil que un segundo nombre. Es como perder el tiempo realizando presentaciones formales entre gente que se reúne para participar en una orgía. A nadie le interesa.
Mi madre solía utilizarlo a modo de alerta amarilla. Así, cuando – por ejemplo – de pequeño me llamaban a comer, uno ya sabía que podía tirar de la cuerda HASTA que ella pronunciaba mi segundo nombre, a partir de ahí, el cachetazo podía llegar en cualquier momento. Uno estaba advertido. He aquí, quizá, la única utilidad del segundo nombre.

De todas maneras, al menos en mi caso, a lo largo de los años me han llamado de numerosas maneras. En la primaria por el apellido (BB. Es un apellido compuesto; aclaración que sirve para aquellos que hayan recibido un mail mío. No me estoy auto diciendo bebé.)
En la secundaria fui desde siempre el “negro”. Apodo cariñoso, cero connotación racial. En el club tuve por poco tiempo otro mote que luego se utilizó para nombrar una jugada lo que originaba infinitas confusiones y se desechó por completo. Hoy la jugada se sigue practicando de vez en cuando y de mi no se acuerda nadie. Una lástima.
Finalmente, mi época universitaria me dio (entre otras cosas) amigos de acero, un titulo profesional y el nick que me acompaña desde entonces y vaya a saber San Croscopio, patrono de los saleros humedecidos, por cuánto tiempo más.
A saber:

BRIKS

Si en este momento Ud. se siente víctima de un mensaje subliminal que le ordena abrir el Google y buscar el significado de esa palabra, le pido me lo comunique INMEDIATAMENTE.

En primer lugar, para confirmar que he tenido éxito con esto de los mensajes subliminales y en segunda instancia para ordenarles – en el próximo post – algo más provechoso a mis intereses personales, tal como el traspaso integro de sus depósitos bancarios a mi cuenta o el envío a mi casilla de correo de esas pornográficas fotos suyas que guardan con tanto recelo. (deje Cameron, a Ud. lo dispenso)
En fin. De todas maneras les ahorro el trabajo. Briks es:

Un bocadito dulce de origen desconocido (lo sabía pero me olvidé), un juego, una bujía, un envase, un ladrillo de plástico


Un grupo de rock de los años ‘60


Una pintora (Miriam Briks)


…pues bien; MI nick NADA TIENE QUE VER con todo esto

2º CONCURSO !!
Por qué me dicen Briks??
(este concurso lo ganó MECHA y nunca le entregué el premio)


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