Desde el sábado a la fecha, no he vuelto a soñar con el mundo blog.
De hecho, dormí bastante poco, y es que tengo que dejar algunos expedientes minimamente al día antes de partir a fumarme todo el humo capitalino.
Sin embargo, lo dicho no es óbice para que continúe con mi habitual recorrida bloggera. Me doy cuenta que disfruto más de comentar que de postear, soy el Mariano Clos de los blogs.
“QUE BUEN POSTEO DON NIEMBRAAAAAAA”
Eso si, me falta un poquito de color, ahora más que un veraniego bronceado luzco un bonito color verde/oscuro más propio de una aceituna al escabeche.
“Lo que importa es la actitud!!” Me digo todas las mañanas mientras tomo asistencia a mi cabellera.
Inmerso en este hermoso trajín de visitar blogs amigos me topé con tres posteos que daban vueltas sobre el mismo tema. ”LAS CITAS A CIEGAS” (Betta 15/04; Morena 20/04 y Claudia 20/04) (ésta última casi obligada, pobrecita, mire.)
El asunto es que se trata de un tema que no miro con malos ojos…
(cita a ciegas…malos ojos…BUENIIIISIIMO!!)
Yo mismo he tenido mis citas a ciegas y no con malos resultados, - habría que preguntarle a las señoritas -, pero creo adivinar la respuesta puesto que siempre nos hemos visto un par de veces más. Tampoco han sido tantas las citas, recuerdo particularmente 3. Dos de ellas por amigos en común y sólo una a causa de la red.
Lo verdaderamente emocionante de las citas a ciegas es que uno no sabe nada del otro más que por referencias de terceros y es así que se popularizó el trilladísimo “es macanuda” como toda respuesta a nuestro ”Cómo esta?”. Uno ya sabía que la mina en cuestión era un bicho. Piolísima, pero un bicho.
Esto de internet cambió un poco las cosas. Se tiene un contacto virtual antes del “encuentro” in the flesh, siempre imaginando un escenario donde todo lo que se nos dice es verdad y no todo lo contrario.
Incluso existe la posibilidad de recibir vía mail, webcams, fotologs, etc, imágenes de la ocasional posible pareja; ahora… qué sucede cuando por numerosos y diversos motivos no obtenemos esa imagen?
Yo digo que Ud. debería sospechar.
Las excusas que van desde, ”no teníamos la cámara” (hoy cualquier celu la tiene) hasta ”no sé como subirlas” pasando por el ”no me anda el scanner" no hacen más que esconder la dolorosa realidad. LA MINA ES HORRIBLE
Pero la vida te ha hecho optimista por naturaleza y esa posibilidad no se te cruza por la cabeza. Te acordas de Tom Hanks y Meg Ryan en “Tienes un Email” y sabes que esta vez el destino te ha sonreído.
Te apuras en arreglar lugar, día y hora porque sabes que allí te estará esperando esa mujer que hace que Liv Taylor sea un fitito cagado por las palomas al lado de tu Audi 326.
Te empilchas con las mejores prendas, te lavas las partes y te perfumas. Estas pi pi cu cú. Pero aún así, como sabes que la señorita es un terrible minón, te agarran todas las inseguridades juntas. No queres fallar. NO PODES FALLAR.
Tranquilo…
Gracias a experiencias personales he recopilado una serie de consejitos que te pueden ser de utilidad.
1.- ya dijimos que la higiene personal es fundamental, aconsejo una buena rasqueteada con CIF cremoso (para que no raspe); ropa interior limpita y de ser posible nueva. Otro bonito detalle es combinar los colores, es una buena oportunidad para sacarte la camiseta del equipo de fútbol que tanto aprecias. También es buena oportunidad para lavarla. Además, no hace juego con las sandalias. Es más, no podés tirar esas sandalias del orto a la mierda? No se para que me gasto, no tenes remedio!.
2.- La puntualidad es un detalle para nada menor y se requiere el toque justo. Llegar “mucho antes” es lo menos. Grita a los 4 vientos que estamos ansiosos, anhelantes, o en criollo: desesperados por ponerla. Llegar “mucho después” tiene dos inconvenientes, el primero es que la señorita puede imaginar que no es lo suficientemente importante para nosotros y por eso la descortesía de hacerla esperar; el segundo, es que se vaya a la mierda a los 10 minutos de esperarnos. (otra noche de autosatisfacción)(mejor no)
Un buen método puede ser citarla en un lugar donde podamos observarla desde el cafecito de la esquina. Cuando la vemos venir, salimos a su encuentro (sin que lo advierta, obvio) cancherísimo, muy “cashual”, eso si, después no vayan a tomar algo a ESE cafecito, a ver si el mozo comete alguna indiscreción del tipo “su vuelto señor” cuando nos estamos sentando o “por fin llegó ésta? Mirá que la esperaste más de media hora macho!!”
hay cada mozo…
3.- ése es otro detalle importante. Dónde llevarla? Y..depende de muchas cosas como el día, la hora… nunca es buena idea invitarla a ver un partido de futbol, menos con lo mal que anda Olimpo ahora. Tampoco me parece piola llevarla al cine. Por cortesía uno tiene que preguntar qué le gustaría ver y mire si se descuelga con algún bodrio medio romanticón, teniendo Indiana 4 en la sala de enfrente!! Además ahí adentro no se puede charlar y para meter mano deberíamos al menos simular que todo lo de ella nos interesa, escuchándolas por un lapso mayor que el de la cola para comprar pochoclos.
Una cena es impensable! Implica muchísimos riesgos, a nadie le agrada verlo chupar los fideos que le cuelgan por la comisura de sus labios, además Ud. siempre salpica tuco para todos lados. Ya le advertí de los mozos. Son unos pesados y no dudan en hacerle chanzas de mal gusto si la mina esta buena, sólo para joderle la vida (encima como están cancheros los chistes suele ser buenos y ud. queda como un gil) “me trae una patita de pollo?” – “cuál la derecha o la izquierda?”(CUAK!) y la estúpida se rie a lágrima suelta. Que hammmbre!!
Una variante para escapar de los mozos son los tenedores libres pero tampoco los aconsejo porque ahí morfas como vikingo y después te agarra modorra, lo que hace que la conversación se torne pesada y molesta. Mejor no.
Nada mejor que un cafecito tranqui, un lugar copado, con onda (y es que, si además tenemos que pagar nosotros – un buen detalle – mejor que sea algo accesible. Vaciar la billetera en la mesa y preguntarle a ella “vos cuanto tenes?” Mientras la moza espera con la cuenta, nunca es un buen gesto)
4.- Ya nos empilchamos, nos encontramos y estamos tomando un cafecito. De qué hablamos? Nada más incómodo que un silencio laaargo. Es importante tener un par de frases sin sentido que descolocarán a la fémina y de paso (si Yisus quiere), generaran nuevos comentarios de ésta, lo que dará lugar a una charla viva y divertida (safamos) un ejemplo sería: si debes tratar a los minusválidos como a cualquier otra persona, estaría muy bien, entonces, cagar a trompadas a un cieguito que nos faltó el respeto, no?”, si la mina es un amante de los bichos lárguele el “los delfines son los únicos mamíferos que duermen con los ojos abiertos debajo del agua” hay infinidad de temas pero nunca, NUNCA le hable de su ex, no le muestre una carta de su ex, ni una foto de su ex y mucho menos con lágrimas en los ojos.
Amigo lector, ya se encuentra elementalmente equipado. Mucho dependerá de Ud. pero siguiendo estos tips no hay manera que le vaya mal, nos queda un detalle, pequeño... minúsculo, ud. esperaba encontrarse con una Diosa poco menos más linda que Angelina Jolie pero se olvidó que Ud., amigo, es Argentino y por lo tanto, salvo memorables excepciones, el resultado no puede ser otro...LA MINA ES UNA MEZCLA DE LA TOTA SANTILLAN, MARIA LAURA SANTILLAN Y EL PERRO SANTILLAN.
La idea de salir corriendo no va con vos.
No te preocupes,
También tengo consejos para esas ocasiones. Espera el próximo posteo.
Ahora me voy a encontrar con una mina en Biei
(pero a esta la conozco desde hace años....muuuchos años)
ja!
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